SEPTIEMBRE
NUEVO EQUIPO, NUEVOS ASESORES.
Durante el mes de septiembre se retoma el desarrollo del anteproyecto, el cual se había detenido aproximadamente 2 meses, esta vez con la partida de algunos integrantes y la llegada de otros nuevos, se creó un equipo de trabajo de tres estudiantes conformado por Estefany Chalarca, David Monsalve y Melissa Villada al cual se le dio el nombre de MORPLES, una palabra compuesta por el nombre del material que se creará (Mortero) y el nombre del material que se utilizará como materia prima (Cartón maples).
Principalmente se capacitó a la nueva integrante, Melissa Villada, en los temas y conceptos básicos del desarrollo del proyecto, se recopilaron los datos que se habían almacenado desde antes de que este se detuviese y por último se resolvió conseguir asesores para la redacción y desarrollo del proyecto.
Este nuevo equipo, que apenes estaba volviendo a despegar, necesitaba de asesores, que aunque no eran capacitados en el tema, podrían ser de gran ayuda en la orientación durante el desarrollo del proyecto, entre ellos se encontraban el docente Edgar Daniel Sánchez Londoño, asesor institucional, y Ruth Zorayda Osorio Gutiérrez, instructora del SENA.
NOVIEMBRE
FERIA Y PRE-FERIA INSTUTUCIONAL.
Para la tercera feria institucional, como es costumbre, se realizó una pre-feria donde el susto, el entusiasmo, el miedo, tantos sentimientos se unían hacia un sólo fin: impresionar a la gente, demostrarles que si somos capaz. Para esta, la profesora Paola anunció que durante la pre muestra institucional, nos evaluarían docentes de otras instituciones y universidades, lo que hizo que nuestros nervios aumentaran, pero no nos dejamos controlar por estos, y poco a poco teníamos más confianza, pasaban las horas eternas hasta que por fin llegó el momento, nuestro evaluador estaba ahí, frente a nosotros, tomando nota y evaluando nuestro proyecto.
Nos desenvolvimos muy bien exponiendo nuestro proyecto tanto, que al final del día, cuando los resultados salieron al público, obtuvimos 99/100 no parábamos de sonreír y del gran orgullo que teníamos.
Luego de nuestro gran triunfo en la pre feria clasificamos a la feria institucional; allí nos correspondía exponerle a todo la institución educativa y a toda aquella persona que estuviera interesada en nuestro proyecto, no dejábamos de sentir miedo y nervios, pero nos ganaban las ganas de hacer las cosas bien y sacar nuestro proyecto adelante, expusimos lo mejor que pudimos durante todo el día, hasta así culminar.
